Te vi...

Cualquiera que ve el título de este nuevo desahogo, pensaría que hablo de un hombre. No, no es un hombre. Sí, es una mujer. Una mujer que hoy me acelera el corazón, provoca emoción y hace sentir desde las entrañas. Siempre provocó cosas, pero desde hace un año 5 meses que no la veía. Hoy la vi. Sonriente. Disfrutando. Feliz. La sorpresa fue instantanea. La recordaba sin tantos movimientos de caderas, gritos de jolgorio, vasos en la mano y voluntad fiestera. Me sorprendí. Verla en imágenes cuando pensé que las posibilidades sólo se limitarían a fotografías fue intenso. La orden era NO llorar, ni emocionarse. Si lloras, dejas de jugar. La presión tras eso fue peor. Vi el típico azul de las grabaciones. Comenzó a correr el tiempo. Se acercaba el momento en que nos encontraríamos de nuevo. Tomé aire. Contuve. Exhalé. Mis ojos antes de ver esa imágenes ya estaban inundados de lágrimas encubiertas. Las miradas estaban puestas sobre mí. Simplemente, sonreía. LLegó el momento y la ví. Año nuevo de 1993 era el escenario. Familia reunida. La ví. Estaba ahí. Bailaba. Reía. Conversaba. Disfrutaba. Uf! Como aguantar este reencuentro tan sorpresivo?. Era ella. No cabía dudas que era ella. Una de las primeras cosas que vi fue una imagen abrazada a su hija de al medio. En otras, junto al clan Flores Espinoza. Se veía bien. Quién hubiera imaginado durante esa celebración que el 2008 dejaríamos de vernos?. Durante ese Año Nuevo éramos felices. Lo somos hoy a pesar de la lejanía corporal?. Después de un año 5 meses es muy pronto para saberlo. Lo que sí tengo certeza, es que cuando yo me reencuentré con ella, quiero que la gente me recuerde diciendo "La Marce fue feliz". Así, tajantes y seguros. Mamá, tarde o temprano nos veremos y me mostrarás tu nueva casa. Mientras yo me quedo con el recuerdo de verte como hoy, disfrutando y feliz.